Las causas que provocan la aparición de los comedones dependen directamente de la etapa de la vida en la que nos encontremos. Así, por ejemplo, durante la adolescencia la causa la encontramos en los cambios hormonales que se producen en estos años, cuando el aumento en los niveles hormonales se acompaña de una mayor producción de grasa o sebo en la piel.
Por tanto, la acumulación de grasa o aceite en los distintos folículos pilosos ocasionan que puedan infectarse y/o inflamarse, dando como resultado la aparición del acné.
Sin embargo, cuando los puntos negros aparecen en personas adultas, la causa más habitual es la existencia de desequilibrios hormonales, especialmente como consecuencia del consumo de determinados medicamentos o fármacos que afectan a las hormonas.
Adicionalmente el uso de ciertos bloqueadores, cremas o maquillaje en las mujeres favorece la obstrucción de los poros y la aparición de los puntos negros.
También es común encontrar comedones durante el síndrome pre menstrual, cuando es común que se produzcan cambios y vaivenes hormonales.
¿Qué hacer para evitarlos?
Si bien es cierto no podemos evitar la aparición de los mismos, si podemos ayudar a minimizarlos.
Una buena opción es lavarnos la cara dos veces al día siempre con agua tibia, y utilizando para ello un jabón suave desarrollado para personas con la piel grasa y con acné. En cualquier caso, debemos evitar la limpieza de la piel excesiva, ya que al contrario de lo que se piensa, podríamos causar daños en la piel y provocar que ésta se reseque o se irrite.
Igualmente se aconseja el uso de lociones, cremas o bloqueadores no comedogénicos, que son ideales porque no bloquean los poros. Además, no es recomendable eliminarse los puntos negros que se muestran cerrados, dado que podemos dañar la piel aún más y corremos el riesgo de aumentar las infecciones.
Realizarse una limpieza facial profunda con un profesional al menos una vez al mes es una práctica ideal para mantener la piel equilibrada.
Para las mujeres que suelen maquillarse es importante que utilicen maquillaje mineral y que las brochas se mantengan limpias y desinfectadas. Nunca dormir con el maquillaje puesto.
Por último y no menos importante es evitar manipularse la cara, utilizar las uñas o instrumentos para eliminarlos.
Conozca a profundidad cada uno de estos tratamientos en nuestros próximos blogs y obtenga los mejores beneficios de estas terapias.
